Me llamo Raphaela.
Brasileña, madre de 3 felinos, perfeccionista y muy exigente.
Soy ingeniera de computación y trabajé muchos años frente a ordenadores y sistemas informáticos. La melancolía de corregir “bugs” reportados por usuarios me hizo cambiar de profesión, y hacer lo que realmente me gusta: el arte del azúcar.
En 2013, nace mi microempresa llamada “Sabores de Vó”, especializada en pasteles y mesas dulces para bodas, celebraciones, cumpleaños y bautizos. Fueron 5 años sacando sonrisas desde los más pequeños hasta los mayores. Pero por cambios en la vida, dejé mi país para venir a Barcelona en 2018.
El desafío más grande de todos. Un nuevo país, otra cultura, y consecuentemente, otros gustos. Empecé desde cero. Hice 2 años de escuela profesional, y me formé como jefa de cocina, jefa de pastelería y directora gastronómica. Pasé por muchas pastelerías famosas como Takashi Ochiai, Pastelería Escribà, L’Atelier y Jon Cake’s.
Siempre con las mismas ganas del principio, lo que siempre quise fue aprender. Pero llega un momento en que quieres más. Quieres emprender algo que te apasiona. Y así, en 2021, surge Cake Art BCN.
Ya no puedo más vivir sin hacer pasteles. Está en la sangre. Y a cada trabajo nuevo, una nueva emoción a cada agradecimiento o sonrisa que recibo.
¿Soy afortunada, verdad?