Soy Carmelo, fotógrafo de bodas.
No busco la perfección, busco autenticidad.
Me inspiran los silencios que lo dicen todo, las miradas espontáneas y esos instantes fugaces que, sin avisar, se quedan grabados para siempre.
Con base en Elche, me desplazo allá donde haya una historia real que merezca ser contada con el corazón.
Si lo vuestro es lo natural, lo sincero, lo verdadero… quizás tengamos que hablar.